
Con el segundo de los partidos de las semifinales en Valencia, finalizaba la temporada 2016-2017 para el Baskonia. Una temporada especial por el nuevo formato de competición en Euroliga, que condicionaba por su exigencia al resto de competiciones, y que en la parte final ha dado la sensación de estar muy cuesta arriba para varios jugadores del equipo.
Mucho se ha escrito estos días en medios de comunicación y en redes sociales acerca de si el equipo había alcanzado o no los objetivos. Pero también acerca de las sensaciones que ha transmitido el equipo, Y para mi es importante separar ambos conceptos.
Si en Octubre nos hubieran preguntado por nuestra idea al respecto de cuáles son los objetivos para el Baskonia, seguramente muchos de nosotros hubiéramos pedido repetir Final Four, ganar o al menos jugar la Final de la Copa, y meternos entre los 3 primeros en Liga. Estos podrían ser unos objetivos bastante exigentes pero que hubieran colmado expectativas.

Con el formato antiguo de Euroliga, otros años se empezaba la competición a un ritmo más suave, disputando una primera fase con algún equipo de los fuertes pero con otros más asequibles, aunque igualmente con viajes complicados.
Sin embargo este año, hemos empezado en Europa directamente en el Top16, jugando con los mejores equipos del viejo continente, y con la obligación de estar totalmente preparados y a buen ritmo desde el primer lanzamiento de balón al aire.
Con estas premisas, creo que hemos podido disfrutar de un bonito estreno de competición, con grandes partidos ante grandes equipos, con victorias de auténtico mérito como por ejemplo las dos ante el finalmente campeón Fenerbahce, y con una gran serie final ante CSKA.
En nuestro particular «palmarés de méritos deportivos» quedará guardada para siempre la victoria que supuso a su vez la mayor derrota cosechada por el gran entrenador Obradovic, el Rey de los banquillos de la cometición europea, en su dilatada trayectoria profesional. Con el título en el bolsillo, seguro que aún se estará preguntando qué pasó aquel día en el Buesa…

Este cruce de Top-8 ante CSKA nos deparó un pobre resultado (3-0 para los rusos), pero nos dejó la sensación de que pudimos haber ganado los tres partidos, Al final no pudo ser, pero creo que el Baskonia dejó una buena imagen y disputó la serie con mucho mérito,
Por tanto, creo que a pesar de no llegar a la Final Four como el año pasado, el balance europeo del equipo es sobresaliente, Y además, en una competición con los 16 mejores equipos de Europa, esta valoración en Euroliga es si cabe más meritoria.
Y seguidamente nos quedan las competiciones domésticas. En la Copa del Rey, el equipo cumplió en cuartos y no falló ante el Tenerife. Y lo menciono de esta forma porque precisamente el torneo del KO depara estas sopresas a equipos que llegan con la etiqueta de favoritos y que sin embargo pueden verse fuera a las primeras de cambio.

Y en la semifinales ante el Real Madrid se perdió un partido que iba controlado a falta de pocos minutos, pero que se perdió al final, dejando una sensación un tanto pobre, puesto que hubo opciones muy serias de haber podido disputar la final en casa, algo que se nos escapó de los dedos.
Y dejo para el final la Liga Endesa. Una competición en la que finalmente el Baskonia ha terminado en tercera posición. Es en ella donde seguramente yo tenga personalmente más dudas acerca de cómo valorarla.
Durante toda la temporada, estaba claro que la prioridad del club, y por tanto del equipo, era la Euroliga. Y que por tanto los partidos de competición nacional quedaban en segundo plano, apareciendo accidentes como el sufrido en Manresa ante el equipo de Ibón Navarro, por ejemplo.
Pero, al menos en mi opinión personal, eran hasta cierto punto intrascendentes puesto que la alternancia de competiciones y los resultados en Euroliga podrían estar motivando estos bajones en el rendimiento del equipo, y puesto que en Liga Endesa el equipo estaba colocado en media tabla de la zona de playoffs.

El final de la Liga Regular del equipo fue muy bueno, acabando en segunda posición tras una rocambolesca combinación de resultados y un gran sprint final. A pesar de que asomaba el camino dificil, con Barcelona, Unicaja o Madrid como posibles rivales, el Baskonia se encontraba finalmente con una ruta aparentemente más asequible, con el Gran Canaria en cuartos, Valencia o Barcelona en semis, y el Madrid o Unicaja en la final.
Sin embargo en esta parte final de temporada, empezaron a aparecer problemas físicos y bajones en el rendimiento de varios jugadores. Y también una sensación de estar cuesta arriba y con la gasolina justa.
Con Gran Canaria se sufrió mucho. Hasta el punto de que un triple errado de Kuric, su mejor tirador, en una situación inmejorable para él, y a tres segundos para el final del tercer partido, casi nos manda de vacaciones antes de lo deseado.

Y en esas llegó el Valencia, Un equipo taronja que había hecho una buena temporada, y que finalmente, excepto en el segundo partido, mostró su superioridad ante el Baskonia, al que dejó sin opciones de victoria.
Finalmente un tercer puesto en la clasificación de la Liga Endesa, que a priori debería ser una buena posición final, pero que dejó la sensación de saber a poco, puesto que muchos de los aficionados pensábamos que el Baskonia era mejor que el equipo de Pedro Martínez, y que deberíamos haber jugado la final.
Este año ha servido también para descubrir a un jugadorazo como Shane Larkin. Al parecer el club ha hecho llegar una propuesta de renovación por tres años al base americano, que esperamos que sea aceptada.
De Larkin recordaremos muy buenos momentos esta temporada, no sólo a nivel individual, que también, pero sobre todo haciendo jugar a sus compañeros, repartiendo asistencias, y cargando con la responsabilidad de dirigir al equipo durante muchos minutos por partido.
Y también fué suya la que quizás sea la jugada más espectacular de esta temporada, en forma de un tremendo alley-hoop a pase de Laprovittola, que nos dejó a todos con la boca abierta.

También me parece interesante destacar la aportación de Voighmann, pese a que su juego ha ido de mas a menos a lo largo de los meses. Creo que es un jugador joven con una proyección tremenda, y estoy seguro que va a consolidarse el año que viene y a mejorar prestaciones.
También quiero mencionar a Beauvois, un jugador de aspecto imperturbable, que sonríe únicamente si le haces cosquillas, y que creo que no ha podido demostrar el juego y la calidad que atesora. Espero que este primer año haya servido de adaptación y que el año que viene rompa.
Vamos a tener sin duda un verano entretenido, como acostumbra a vivir año tras año el Baskonia. Primero se deberán concretar las salidas de los jugadores que vayan a salir, y también deberá decidirse si Sito Alonso vuelve a estar en el banquillo baskonista o si deja paso a otro entrenador.
Yo valoro muy positivamente las continuidades tanto de los jugadores como de los entrenadores en estos equipos. Creo que uno de los factores decisivos para construir un equipo campeón y que consiga títulos es constituir un bloque sólido y estable durante varias temporadas.

Y por este motivo, yo sí que apostaría por la continuidad de Sito Alonso. Seguro que habrá habido cosas mejorables en su gestión deportiva, pero también las ha habido buenas durante muchos momentos de la temporada, y creo que merece la pena su continuidad. Me parece mejor opción que apostar por comenzar de cero desde el banquillo.
Y también durante estos días estamos viendo ciertos movimientos en los jugadores, como el anuncio de la renovación de Toko (a mi juicio muy importante), el anuncio del fichaje de Timma, o las noticias acerca de Vildoza y su interesante estado de forma. Y rumores, muchos rumores.
Pero en las fechas en las que estamos, todavía este puzzle tiene demasiadas incógnitas. Estamos aún en Junio, y esta carrera de obstáculos necesaria para construir un equipo, no ha hecho más que empezar.

Como cada verano, estoy seguro que el Baskonia va a hacer un esfuerzo por traer los mejores jugadores posibles, y que nos va a volver a ilusionar. Porque al menos a mi, todos los años me acaba ilusionando, y me deja siempre con muchas ganas de ver al equipo empezando a entrenar de nuevo y a jugar partidos, aunque sean amistosos.
Creo también interesante comentar que el club pasa ahora mismo por un gran momento de forma en el aspecto económico. Indudablemente la buena trayectoria de este año pasado del Alavés, con su asentamiento en Primera, la final de Copa, los ingresos por televisión, patrocinios, taquillas…, etc., suponen un pilar tremendo para la estabilidad del club, a lo que hay que sumar toda la parte correspondiente al Basket (TV de Euroliga, taquillas, etc.).
Con todo ello, estoy seguro que el año que viene volveremos a ver un Baskonia competitivo peleando por estar colocado en lo mas alto. A veces nos olvidamos muy rápido de lo difícil que es subir, y sobre todo mantenerse, pero sin duda vamos a estar allí.
Espero que los próximos días sigamos teniendo noticias positivas en forma de alguna renovación, o algún fichaje. Y puestos a pedir, que podamos ver de vuelta jugando en casa, a alguno de los dos grandes pivots exbaskonistas que tengo ahora mismo en mente…

Quiero cerrar estas líneas deseando mucha suerte con la operación y con la recuperación al jugador que más ha aplaudido y animado a sus compañeros. Un tío de equipo, un luchador, y una persona de las que tienes que tener siempre en tu equipo. Rafa, espero verte dentro de nada corriendo de nuevo por el pabellón. Ánimo!
Baskonia, este año se acaba, toca pensar, analizar todo bien y reconfigurar el equipo. Pero el año que viene estaremos allí de nuevo. Y por Dios, que llegue pronto!
Aupa Baskonia!!!!